domingo, 15 de abril de 2012

Saben que Leda, puso huevos


Ahora contare algo de estudios de las más bellas de las épocas de la que los niños y jóvenes de estas dos últimas décadas desconocen gracias a las reformas educativas que han eliminado la “Historia Universal” de las carpetas. Esto se me vino a la memoria a razón de que mi pupila me dijera que desconocía de las mitologías y como se comía eso.
Óleo en lienzo 1532 de Antonio Allegri Correggio

Hablare del inmortal Dios Zeus quien era un gran seductor y adquiría las formas más inverosímiles para lograr sus objetivos, generalmente de amor, diríamos que para la actualidad sería un metrosexual empedernido, muy decidido y sin límites. Era ciertamente el rey de los dioses en una liga de zoofilia solito él. Y las mujeres de Grecia tenían unos gustos más parecidos a la National Geographic que a Playboy, según parece.
La bellisima Leda era la esposa del rey de Esparta, vivía aburrida inmensamente en la corte de los belicosos y nada elegantes espartanos y si no juzguen ustedes: un día vio un cisne huyendo de un águila y era tan hermoso que no sólo lo protegió… sino que se enamoró de él. Y no sólo se enamoró de él sino que “yació con él”, como dicen castamente esos poemas delicados. Entienden en que se aburría supongo.

En fin, nada pues, revelarles que el cisne era Zeus que tenía tiempo persiguiéndola y se había encaprichado de Leda.

A ver… tengamos en cuenta que la mujer de Zeus, era celosa (Hera o Juno; fue una diosa vengativa, con rostro de blancura deslumbrante, protectora de hogares y familias, mujer de compañía agradable pero de carácter irascible, y extremadamente celosa). Por ello se puede entender que Zeus apelara a los disfraces más inverosímiles para escaparse de la vigilancia de su señora con la que lo casaron en castigo obligatoriamente, y esa es otra historia (Este matrimonio lo decidió Fatun -Dios del Destino- se lo representaba con el globo terrestre bajo sus pies y tenía en sus manos la urna que encierra el futuro y la suerte de dioses y de mortales).
Leda, autor desconocido, escuela Da Vinci

Dado que podía convertirse en cualquier cosa, está bien, se escapó como cisne. Pero si consigue que una mujer se enamore de él conservando la forma de cisne, yo digo que ella francamente se merece lo que le pase. Y lo que le pasó no es poco. ¡Leda puso dos huevos!

La mecánica del asunto no me la pregunten; se suele dibujar cada huevo como para contener dos niños, pues de cada uno nació una pareja de gemelos. No contenta con el adulterio avícola, se ve que Leda decidió sumarle la calumnia, diciendo que al menos dos de esos cuatro niños eran de su esposo Tíndareo. Que una mujer ponga un huevo por andarse apareando con un cisne, digamos que se entiende. Pero que ponga otro huevo sin que haya cisne de por medio… es demasiado raro.

Las versiones varían, pero la usual es que de un huevo nacieron Helena (la misma secuestrada belleza que causaría de la guerra de Troya) y Castor. Del otro huevo nació Polux y Clitemnestra. Y aquí surge una maravilla de la genética: los Dioscuros, o sea Castor y Polux (la palabra significa Hijos de Zeus) son gemelos pero de distinto padre y uno de ellos, Castor, por ser hijo de Zeus, es inmortal pero Polux no.

Te gusto la mitología…pues hay mucho más belleza de la que te imaginas si continúas investigando la historia de Grecia, país del origen de todas las culturas. Y para dejarte más miel en el cerebro te contare otro pedacito de mitología como final.
"Leda" por Salvador Dalí que uso de modelo a su esposa
Antes de casarse, Hera había resistido el cortejo de Zeus, rechazando los regalos que él le ofrecía. En lugar de resignarse a la negativa, el dios optó por asumir la forma de un pajarito mojado por la lluvia, que temblaba en la ventana. Conmovida, Hera lo llevó a su pecho para calentarlo y fue entonces cuando Zeus recuperó su verdadero aspecto y aprovechó la sorpresa para concretar sus potenciales deseos tanto tiempo postergado. Después de haber sido violada, Hera no podía hacer otra cosa que aceptar la propuesta de un matrimonio reparador. Zeus no era inexperto en lides eróticas. Se había enamorado sucesivamente de la diosa Metis (hija del Océano), quien se resistió a consumar la unión, por lo que terminó siendo devorada por Zeus, quuien parió luego a Pallas Atenea, surgida de un tajo de su cabeza, gracias al golpe del hacha de Hefesto. De su relación con Temis (hija de Urano) nacieron las Horas. La relación con Mnemosine fue todavía más fecunda, porque de ella nacieron las nueve musas...
Annibale Carracci: Zeus y Hera
Así que aquí lo dejo, tu sigue buscando la "lectura", que también es una Musa...bye ♫

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